Seleção do Sistema de Líquido Penetrante: Considerações e Critérios 

Cuando se decide realizar una inspección con líquidos penetrantes, hay que seleccionar el sistema. Existen muchas variedades de penetrantes, sistemas de eliminación y reveladores. También hay diferentes formas de combinar estos sistemas. Para la gran mayoría de las piezas, el método convencional de LP lavable con agua es adecuado, pero hay que tener en cuenta varios factores a la hora de seleccionar el sistema ideal. El sistema debe: indicar grietas abiertas significativas en la superficie de la pieza no afectar inadvertidamente al material o a la pieza en servicios posteriores no ser caro hasta el punto de ser económicamente inviable no ocupar tanto tiempo que ponga en peligro la programación de la producción.

El material a ensayar (probeta)

Muchos materiales metálicos o no metálicos pueden inspeccionarse satisfactoriamente mediante métodos convencionales de LP visible y fluorescente, pero el acero inoxidable austenítico y las aleaciones de titanio (a temperaturas elevadas) están sujetos a la corrosión. Para estos metales, los materiales penetrantes deben tener controlado su contenido en azufre y halógenos. Hay otros materiales que se ven afectados por el agua, para los que se recomienda un sistema no acuoso. Algunos materiales no metálicos se ven afectados por penetrantes o emulsionantes basados en determinados disolventes. Para estos materiales, se recomienda un penetrante de base acuosa.

Qué tipo de penetrante utilizar

En general, los sistemas de inspección por líquidos penetrantes se utilizan para todo tipo de piezas, pero en servicios en los que la pieza está en contacto con oxígeno líquido (LOX) u oxígeno gaseoso (GOX) y en aplicaciones nucleares, deben desarrollarse penetrantes específicos.

¿Cuál es el tamaño significativo de los defectos en las probetas?

Algunos procesos penetrantes pueden detectar discontinuidades de tamaño inferior a 1 nanómetro, pero ¿es necesaria esta extrema sensibilidad? El proceso penetrante ideal es aquel que indica las grietas superficiales que podrían afectar a la eficacia de las piezas, al tiempo que minimiza las indicaciones no relevantes (como las causadas por la rugosidad de la superficie). Para seleccionar este sistema ideal, es necesario definir qué grietas son importantes, de qué tipo, tamaño y ubicación afectan a la pieza. Consultar el historial de piezas similares es muy útil para hacer la elección.

Encontrar las partes críticas.

Normalmente, la gran mayoría de las piezas a comprobar pueden ser muy similares, con sólo un elemento crítico que requiera la máxima sensibilidad de la prueba. En función de la cantidad de que se trate, puede resultar más económico instalar un sistema de líquidos penetrantes convencional para la mayoría de las piezas y enviar un artículo con requisitos más estrictos a un laboratorio que realice ensayos no destructivos comercialmente (subcontratación). Del mismo modo, muchas empresas disponen de su propio equipo radiográfico para las aplicaciones normales, pero envían piezas a laboratorios externos para realizar ensayos que requieren equipos muy específicos.

¿Cuántas piezas deben revisarse y con qué frecuencia?

Una vez establecidos el tamaño y el tipo de defecto que hay que encontrar, se evalúan los distintos sistemas de inspección por líquidos penetrantes que serían apropiados. En consecuencia, la elección en este caso se basará generalmente en factores de coste como la inversión necesaria, los materiales empleados, la necesidad de tratar el agua de lavado o el espacio necesario para la prueba.

¿Dónde debe realizarse la inspección?

Conviene evaluarlo, sobre todo si sólo hay que inspeccionar un número reducido de piezas y, por tanto, resulta más económico recurrir a un laboratorio para realizar las pruebas. ¿Existen instalaciones comerciales de fácil acceso, o causaría un retraso inaceptable enviar las piezas fuera de la empresa? ¿De cuánto espacio dispone la empresa para el proceso de inspección por líquidos penetrantes y dónde está ubicado? ¿Cuándo se probará la pieza? ¿En la inspección de recepción, durante el proceso, durante el embalaje, como producto acabado o en varias fases? ¿Hay piezas que deban probarse en cestas de prueba, o en ganchos, o sobre el terreno, lejos de otras instalaciones? Para estos casos, los kits de líquidos penetrantes portátiles pueden ser la mejor solución.

¿Cuál es la manipulación necesaria de las piezas?

¿Cuál es el tamaño, la forma y el peso de la pieza que se va a probar con líquidos penetrantes? ¿Las piezas son grandes, pesadas e incómodas, o son ligeras, pequeñas o ambas cosas? ¿Son necesarios sistemas y técnicas de manipulación adicionales?

Lista de control para elegir el método adecuado.

Las empresas consideran los siguientes factores con los proveedores de equipos y productos de ensayo por líquidos penetrantes antes de decidir qué sistema penetrante se utilizará:

1. material a ensayar: aluminio, magnesio, aleaciones de cobre, acero inoxidable austenítico, aleaciones de níquel, titanio, hierro, acero, etc.

2. Número de probetas o zonas de prueba que deben inspeccionarse: por hora, por jornada, por día o por semana.

3. Tamaño de los objetos de ensayo que deben manipularse: dimensiones superiores a 2 cm, 10 cm, 50 cm, l m, 2 m, 5 m, 10 m, etc.

4. Peso de los objetos de ensayo que deben manipularse: de l a 300 g, de 300 g a l kg, de l a 3 kg, de 3 a 10 kg, de 10 a 30 kg, de 30 a 100 kg, etc.

5. Lugar donde se requiere la inspección; recepción, en el proceso a lo largo de la línea de producción, durante el montaje, inspección final, en el campo durante el montaje, prestación de servicios o en los departamentos de mantenimiento.

6. Tipos de defectos que deben detectarse: pequeños, profundos, grandes, superficiales, aglomerados o dispersos. Porosidad, grietas, costuras, huecos, rugosidad.

7. Estado de la superficie de las piezas a inspeccionar: Moldeadas, forjadas, mecanizadas, dobladas, pulidas, laminadas, pintadas, corroídas, erosionadas, rayadas, desconchadas.

8. Condiciones a las que se someterán las piezas tras la inspección: sistemas médicos, nucleares, de oxígeno líquido o gaseoso; operaciones de soldadura, laminado o revestimiento; usos a alta temperatura, aeroespacial, industrial, transporte; posiciones inaccesibles; productos de consumo; etc.